Aprender es la prueba de que estamos vivos. La curiosidad, ese instinto que evita que nos extingamos, nos empuja a adquirir nuevo conocimiento. El entorno cambia y te adaptas aprendiendo. El nuevo reto intelectual, con su dosis de dopamina correspondiente, te empuja a seguir haciendo cosas. El aburrimiento, enemigo de la felicidad para el maestro Schopenhauer, se queda sin escondites ante el ejercicio de aprender.
Aprender es lo que te permite mejorar tus capacidades de partida. El camino nunca es lineal. Lees tres artículos sobre el tema y te sientes experto. La arrogancia de creerte el más listo de la habitación te impide ver la lección. La hostia te baja los humos. No aprendemos por ósmosis, aprendemos por ostiosis. La humildad (¡mantenida en el tiempo y no solo después de la hostia!) deja espacio al aprendizaje. La palmadita en el hombro, regalada con demasiada facilidad, crea auténticos monstruos. Si te faltaban motivos para creer que lo sabes después de leer, ya ni siquiera tres artículos, sino tres hilos sobre el tema, ahora tienes síndrome del impostor. ¿De verdad eres tan bueno para hablar de síndrome del impostor?
Sobrevivir, enseñar, no aburrirte, disfrutar, encontrar trabajo, nutrirte, mejorar, resolver problemas, crearlos, explorar, descubrir, conocer personas interesantes, vivir. Sobran los motivos para aprender. La evolución te ha regalado la capacidad de procesar información, codificarla y recuperarla. Tienes un mecanismo que, aunque no sepas cómo funciona, te mantiene constantemente aprendiendo.
Responder a la pregunta “¿Por qué aprender?” permite darle un sentido a una de tus capacidades innatas. Quizás te engañe el orden y no tenga ningún sentido. Yo todavía no estoy seguro del por qué y tampoco creo que me haga falta. Lo que sí tengo claro es que aprender es un camino sin fin. Al menos este es el sentido que he querido darle. Aprendizaje Infinito, a donde quiera que me lleve.
Sergio -.
P.d: Para escribir esta edición he recurrido a la sabiduría de mi tweetline. No esperaba tantas respuestas, ni de tanta calidad. Gracias.
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Gracias por leer Aprendizaje Infinito.