Simler habla de "creencias funcionales y creencias sociales". En la misma línea Kurzban y Christner hablan de las creencias como "dispositivos de compromiso con el grupo" o D. Williams habla de "creencias socialmente adaptativas". Todos vienen a confluir en una idea semejante a la que nos traes: que la gente es aceptada o rechazada en base a sus creencias, por lo que una función de la mente puede ser sostener creencias que procuren al que las sostiene el mayor número de aliados, protectores y discípulos, más que creencias que sean verdaderas (S. Pinker). Al final lo que sucede es que a la selección natural que criba las creencias meritocráticas, se le añade la selección sexual, la que permite que el pavo ostente su aparatosa y vistosa cola, y que permite que sobrevivan las creencias clientelares. Es parte esencial del contenido de la asignatura de pensamiento crítico que hemos comentado alguna vez. Gracias por traer esta referencia.
Gracias por el comentario, Javier. Al final es ser más conscientes de todos los factores que influyen en nuestros pensamientos y no creernos más objetivos de la cuenta.
El tema de desarrollar un pensamiento crítico y lidiar con las creencias clientelares propias, ya es un desafío muy grande. Ahora intentar convivir con las creencias clientelares de los demás, es aún más complejo. Dentro de este boletín, tocas el tema de que las creencias clientelares para la mayoría de las personas son meterse con su ego. Es lo que los define como personas y no debería ser así.
Al final, desde mi punto de vista, es que las personas que aprenden a desarrollar un pensamiento crítico, es necesario aprender a usar las creencias clientelares a su favor para seguir a delante y sobrevivir con los demás, porque ningún ser humano puede solo en esta vida.
Gracias por el comentario, Camino. Me gusta mucho la reflexión con la que cierras: ningún ser humano puede solo en esta vida. Al final las creencias tienen ese papel tan importante de ayudarnos a encajar en un grupo.
Simler habla de "creencias funcionales y creencias sociales". En la misma línea Kurzban y Christner hablan de las creencias como "dispositivos de compromiso con el grupo" o D. Williams habla de "creencias socialmente adaptativas". Todos vienen a confluir en una idea semejante a la que nos traes: que la gente es aceptada o rechazada en base a sus creencias, por lo que una función de la mente puede ser sostener creencias que procuren al que las sostiene el mayor número de aliados, protectores y discípulos, más que creencias que sean verdaderas (S. Pinker). Al final lo que sucede es que a la selección natural que criba las creencias meritocráticas, se le añade la selección sexual, la que permite que el pavo ostente su aparatosa y vistosa cola, y que permite que sobrevivan las creencias clientelares. Es parte esencial del contenido de la asignatura de pensamiento crítico que hemos comentado alguna vez. Gracias por traer esta referencia.
Gracias por el comentario, Javier. Al final es ser más conscientes de todos los factores que influyen en nuestros pensamientos y no creernos más objetivos de la cuenta.
Gracias. Es un tema complejo.
El tema de desarrollar un pensamiento crítico y lidiar con las creencias clientelares propias, ya es un desafío muy grande. Ahora intentar convivir con las creencias clientelares de los demás, es aún más complejo. Dentro de este boletín, tocas el tema de que las creencias clientelares para la mayoría de las personas son meterse con su ego. Es lo que los define como personas y no debería ser así.
Al final, desde mi punto de vista, es que las personas que aprenden a desarrollar un pensamiento crítico, es necesario aprender a usar las creencias clientelares a su favor para seguir a delante y sobrevivir con los demás, porque ningún ser humano puede solo en esta vida.
Gracias por el comentario, Camino. Me gusta mucho la reflexión con la que cierras: ningún ser humano puede solo en esta vida. Al final las creencias tienen ese papel tan importante de ayudarnos a encajar en un grupo.